Ser resiliente consiste en asumir las situaciones de riesgo y sobreponerse a ellas. No se trata de fuerza física, sino de mental.
La principal característica de una persona resiliente es que es más feliz, pues tiene la capacidad suficiente para enfrentar el dolor y salir bien librado de él, por lo que su autoestima y estilo de vida son mejores.
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Aunque algunas personas pueden ser naturalmente más resistentes que otras, hay cosas que puedes hacer para aumentar tu reserva de resiliencia.
Y aunque puedas soportar los golpes de la vida, es importante que día con día trabajemos en nuestra resiliencia, por nuestro bienestar mental.
Por esto, te queremos contar sobre las cualidades que posee un hombre resiliente, para que sigas su ejemplo:
7 cualidades que tiene un hombre resiliente
1. Autoconocimiento.
Para ser una persona resiliente es esencial conocer tus fortalezas y habilidades, así como tus debilidades y limitaciones.
Para así identificar los aspectos en los que puedes mejorar y que te ayudará a darte ese voto de confianza para impulsar tu autoestima y recordarte que un problema es un reto, pero no el fin.
Una persona que se conoce, puede reconocer lo que siente y le permite desahogarse de la forma correcta.
2. Empatía.
La empatía es la capacidad de entender lo que le sucede a otra personas y ponernos en su lugar, comprender sus sentimientos, a través de comprender los nuestros.
Cuando sentimos empatía, podemos dar y recibir más afecto en nuestras relaciones, por lo que te tendrás ayuda, impulso y comprensión.
Construyes una red de apoyo en los momentos difíciles y serás un recordatorio de que se puede salir adelante en la adversidad.
3. Hacerle frente a la adversidad.
Un hombre resiliente es capaz de ver los problemas con inteligencia, pero también con humor y amor propio.
Se recuerda que es capaz de sentir mucho y diferentes cosas en los momentos difíciles, y que cegarse, enojarse o frustrarse no le ayudará en nada.
Por esto, prefiere encontrar el lado positivo o una lección cuando se presenta un problema.
Le hace frente para entenderlo y poder superarlo.
Porque si lo deja para después o trata de olvidarlo, las cosas pueden empeorar o resultar más desagradables.
4. Se enfoca en el presente.
Para ser resiliente es esencial crear el hábito de vivir en el aquí y en el ahora, sin dejar que el pasado te atormente o la incertidumbre por el futuro te afecte.
Aunque suena imposible, es algo que puedes lograr si enfocas tu mente, talento y capacidades en lo que puedes resolver hoy.
Puedes sanar el pasado y obtener un mejor futuro, si cuidas y te enfocas en este momento.
5. Perseverancia.
No se trata de querer algo, sino de trabajar por él. Por esto una persona resiliente, tiene fuerza de voluntad y disciplina.
No es que busque perfección o se aferre a las cosas, se permite ser flexible y vulnerable, pero no cae en la obstinación.
Trabaja para mejorar, pero suelta cuando sabe que ya no es su lugar o merece algo mejor.
6. Valora a su red de apoyo.
Un hombre resiliente valora a sus amigos y familiares, no porque le den apoyo o un beneficio, sino por agradecimiento y estima.
Incluso, porque estas personas confiaron en él cuando nadie más lo hizo, incluso él mismo.
Cultiva su red de apoyo con reconocimiento, cariño, tiempo y calidad, porque sabe que son su refugio seguro y que aunque todo le esté saliendo bien, en cualquier momento puede acudir a ellos.
7. Tolerancia a la frustración.
Un hombre resiliente no busca tener el control de cada aspecto de su vida, aunque busca que le vaya bien, sentirse cómodo y feliz con ella, no se aferra a la perfección.
Él prefiere tener claridad para no enfocarse en la incertidumbre de lo que no conoce o de lo que no puede manejar.
Se pone a prueba y va por todo, pero no se molesta si las cosas no salen cómo él quiere, prefiere aprender de esto y seguir adelante.
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