En la vida, habrá días buenos y malos, algunos llegarán por cosas del destino y otro se harán presentes por las acertadas o equivocadas decisiones que tomemos.
Cada día es una nueva oportunidad para alcanzar nuestras metas o para quedarnos rezagados.
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Debemos tener muy presente que la vida es muy fácil y que muchas veces, nosotros tomamos decisiones erróneas que la vuelven muy difícil o un tormento.
Ya sea que creamos ciertas cosas, tengamos expectativas altas o nos creemos merecedores de cualquier cosa, todo esto, provoca que no seamos felices y que no alcancemos nuestros propósitos.
Por esto, es importante tomar las decisiones correctas para no complicarnos la vida y abrirnos paso a la felicidad y el éxito:
5 decisiones que tomas diariamente y hacen tu vida más complicada
1. Te tomas todo muy personal.
Dicen que no puedes controlar lo que los demás hacen, pero sí puedes manejar lo que te hacen sentir.
Sin embargo, si te tomas muy personal o crees que todo el mundo está en tu contra, solo estás complicando tu vida.
Deja de ofenderte por lo que dicen o hacen lo demás, mejor concéntrate en ser una mejor versión de ti mismo o en ocupar ese tiempo en algo más productivo para ti.
2. El mundo gira alrededor de ti.
No solo buscas ser el centro de atención también crees que debes apagar a otros para que tú puedas triunfar.
Ten presente que sí debes ser el protagonista de tu propia vida, pero no es necesario ni ético, entrometerte en la vida de los demás.
Mientras más quieras encajar o brillar a toda costa, menos oportunidades tendrás de demostrar tus verdaderos talentos.
3. Piensas en lo peor.
A menudo piensas que perderás todo o que todo se derrumbará cuando más feliz seas.
Por ejemplo, un vuelo a otro país se convierte en un accidente aéreo. Llegar tarde al trabajo, te convertirá en el peor empleado.
Las cosas malas suceden, pero estamos seguros de que no siempre te pasarán a ti.
Así que, deja de atraerlas y concéntrate en hacer que todo salga de forma excelente.
4. Esperas.
Diariamente tomas la decisión de esperar que la vida, la suerte o una persona se apiade de ti y te dé lo que siempre has deseado.
Nadie te va a regalar o entregar el éxito, solo porque sí, necesitas trabajar arduamente y ser digno de él.
5. Te detienes.
No solo te detienes en el primer fracaso, en ocasiones, ni lo intentas porque crees que perderás todo.
Tomas la decisión de “abrazar” a tu zona de confort para no perderlo todo, pero en realidad no tienes nada, porque nunca te arriesgas y solo te paralizas.
Para ser feliz, necesitas dejar ir las cosas que te pesan, trabajar tu camino, hacer cambios y dar lo mejor de ti hasta que tengas éxito.
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