Si siempre te quedas en relaciones o con parejas que no valen la pena, es momento de que analices el patrón que estás siguiendo.
Tal vez, en este momento te estás justificando y asegurando que todo está bien en tu relación y que solo es un bache.
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Y aunque todas las relaciones hay problemas, la tuya es peor, porque estás siendo muy infeliz al lado de una mujer que no te valora ni te quiere.
Te quedas con ella en el nombre del amor, porque crees que la harás cambiar de opinión o que algún día cambiará, pero esto no pasará, solo te quedarás esperando sin recibir nada a cambio.
Por esto, es momento de que veas las banderas rojas, pero que hay en ti, para que así notes que te estás equivocando al quedarte con alguien que no te merece…
Por qué te quedas en una relación que te hace daño
1. Te disculpas todo el tiempo.
No te sientes merecedor de un buen amor y por eso le ruegas a uno que no te conviene.
Te quedas con alguien que no te hace bien y que solo te lastima, porque crees que no mereces algo mejor.
O que jamás llegará a ti y si llega te dejará en poco tiempo. Por esto, prefieres perdonar sus errores y hasta disculparte por sus traiciones.
2. No sabes estar contigo mismo.
En ocasiones, la soledad nos aterra y sentimos que nosotros mismos somos nuestra peor compañía.
Por esto, preferimos seguir en relaciones tóxicas o que no nos aportan nada, creemos que eso es mejor que estar solos.
Sin embargo, en algún momento debes darte la mejor oportunidad de tu vida, es decir, soltarla a ella, para tomarte a ti y darte cuenta de que ya lo tienes todo y eres una persona maravillosa.
Solo es cuestión de atreverte y ver que no estás solo, estás con una grandiosa persona, que eres tú mismo.
3. Minimizas lo que pasa.
Aseguras que todo está bien o que no es tan malo como parece y no le estás dando la importancia que merece la situación.
Te quedas con ella aunque te haga sufrir, y crees que eso es parte de una relación amorosa, pero te equivocas.
Hacer menos el daño que te hace, solo causará que sus malos tratos aumenten y terminen por destruirte.
4. Finges algo que no eres.
Para encajar o para estar en las mismas condiciones que tus amigos o personas cercanas a ti, sigues a su lado porque no quieres ser la única que está soltero en sus 30.
Incluso, pudo ser que al inicio te “modificaste” para conquistarla y ahora no sabes cómo seguir adelante.
Crees que ella vale la pena, pero solo te estás aferrando a algo que no eres y que en el fondo también sabes que no quieres en tu vida.
5. No has sanado.
Te quedas con ella, porque no te has tomado el tiempo de sanar las viejas heridas, tanto de relaciones pasadas, familiares o de tu vida.
Tienes una cicatriz que no te permite amar y ser amado de la forma correcta. Te conformas con ella porque no quieres enfrentar los fantasmas del pasado y crees que con ignorarlos todo se resolverá.
Sin embargo, siempre estarás detrás de ti, atormentándote.
¡Ahí ya no es!
Es momento de que veas estas banderas rojas y busques ayuda, porque mereces un buen amor.
Y no te lo decimos para señalarte, juzgarte o hacerte sentir mal, sino para que comiences a sanar y estés rodeado de lo que mereces, que es mucho amor.
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