Gemir es parte fundamental de las relaciones sexuales, porque de esta forma inspiramos a nuestra pareja a darnos placer y le comunicamos que estamos gozando.
Sin embargo, si ella no es capaz de hacerlo contigo, no es solo porque no sienta placer.
También podría deberse a la falta de comunicación o que solo te estás enfocando en ciertas cosas.
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Por esto, es importante que le comuniques a tu pareja seguridad y hagas acciones que provocan que ella disfrute al máximo.
A continuación, te decimos que puedes hacer para que goce al máximo con tus caricias:
5 claves para que una mujer sienta placer con tus caricias
1. Sorpréndela.
Toma las riendas de la situación y cuando menos se lo espere, hazle un oral. Al no estar preparada podrá dejarse llevar por el momento.
Sobre todo, cuando solo te enfocas en la penetración y no haces nada diferente.
Incluso, puedes realizar una fantasía que no hayan probado, así se sentirá en más confianza contigo.
2. Habla con ella.
Si quieres hacer gemir a una mujer es importante que le expreses este sentir.
No solo para que te ayude a saber si disfruta estar contigo también para que sepa que no será juzgada.
También pueden comenzar con un poco de sexting o decirle algunas palabras sexys y sexuales al oído. Para después pedirle retroalimentación.
3. Perfecciona tus técnicas.
A muchas mujeres les fascina el sexo oral, pero para que ella pueda sentir placer y gozarlo, necesitas mejorar tu técnica.
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También puedes probar con otras cosas técnicas.
4. Muéstrate seguro.
Para que ella se pueda expresar sin sentir pena, es importante que tú domines el momento y te sientas seguro con lo que haces y en el momento.
No solo se trata de hacer posiciones extrañas o de hacer todo tú, sino que le comuniques a ella a través de tu cuerpo, palabras y caricias que te gusta su desempeño y que están en un momento íntimo.
En donde los están gozando por igual.
5. Estimula sus zonas erógenas.
Cada mujer tiene diferentes zonas erógenas, pero las más comunes son el cuello, la espalda, el pecho o las piernas.
Así que, puedes darle más cariño a estas zonas o prestarle más atención durante las relaciones sexuales.
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