No sabemos si está bien o mal que tu jefe sea tu amigo, lo que sí estamos seguros es que no le debes contar todo.
O al menos NO esas cosas que podrían afectar la percepción que tiene él o ella de tu trabajo, o incluso que pueda llevarlo a tomar una postura desfavorable o radical en relación a tu cargo.
Entonces, si quieres evitarte problemas y líos, mejor es que te muestres cauteloso al momento de compartir estas 5 cosas con tu jefe:
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1. Lo que haces durante tu tiempo libre.
Si saliste en la noche, si tienes problemas con tu pareja, si a tu hijo le pasó algo…¡no debe saberlo!
Además, cuida lo que pones en las redes sociales, sobre todo si te sigue y es un activo usuario de las mismas.
2. Cuando tu jefe no está a la altura de tus expectativas.
Lo mejor es transmitir serenidad, firmeza y corrección -con respeto- en aquellas cosas que se pueden mejorar.
Si en algún momento no te sientes escuchado o a gusto; comienza a buscar otro empleo que te motive y con el te sientas más satisfecho.
3. No le digas NUNCA que buscas otro empleo.
Esto limitará tus oportunidades de ascender, y también da a entender que estás descontento y quizá no tan comprometido con tus labores.
4. No exageres con tus habilidades.
Recuerda que decir la verdad te llevará a ganarte la confianza de él o ella; y eso es mejor recompensado que tus habilidades para editar, usar excel o conseguir un cliente, por ejemplo.
5. No compares tu sueldo con el de los otros.
Nunca, pero Nunca, te compares con los otros empleados, incluso cuando estés ante una injusticia.
Mejor defiende tu postura con hechos y argumentos contundentes, pero no con cosas que te hagan ver como envidioso o mal intencionado.
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