Tratar con tu jefe es algo esencial y a veces difícil en cualquier ámbito, a menos que no trabajes para nadie o tú lo seas.
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Pero los jefes son seres humanos también (aunque a veces no lo aparenten) y hay maneras de llegar a ese duro interior que tanto guardan:
1. Haz tu trabajo y hazlo bien.
Parece algo obvio y redundante, pero el primer paso para ganarte a tu jefe es que tengas todo en orden en cuanto a tu trabajo. Teniendo esto como base te garantiza el éxito con los siguientes pasos.
2. Acepta nuevos retos.
Siempre que se requiera algo extra en el trabajo asegúrate de ser el primero en aceptarlos. Tal vez falles en algunos, pero nadie te puede quitar la satisfacción y el reconocimiento de que lo intentaste.
3. No descuides la parte emocional.
Además de la parte laboral, pon atención a aspectos emocionales. El chiste está en que sepa que cuenta contigo para cualquier emergencia de su vida privada. Este consejo es un arma de doble filo, pues a algunos jefes les gusta marcar claramente la diferencia entre ambos aspectos. Trata de sutilmente platicar de cosas no relacionadas al trabajo durante algún receso o comida. Puedes empezar por gustos musicales o cinematográficos, o algún suceso importante en el mundo.
4. Mantén abiertas las vías de comunicación.
Aunque sea para consultarlo sobre cualquier duda, tu jefe tiene que saber que es accesible para ti en cualquier situación.
5. Ofrece un punto de vista distinto.
Claro, a todos nos gusta tener la razón, pero también es importante abrir los canales para el debate. En vez de seguirlo ciegamente en todas sus decisiones, trata de cuestionarlo (con mucho respeto) y ofrecerle otras opciones.
6. Anticipa sus necesidades.
A todos nos gustan las personas preparadas ante cualquier previsto. Aunque específicamente no te pida algo en concreto, trata de anticipar cualquier obstáculo en el camino para estar listo.
7. Algunos días pasa más tiempo en la oficina.
Llegar más temprano e irte más tarde siempre denota dedicación y lealtad al trabajo. Trata de adelantar tu trabajo de los próximos días algunas veces y que vea que pasas más tiempo en la oficina que otros.
8. Sé tú mismo.
El más importante de todos, siempre demuéstrate auténtico.
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