Imagínate que es viernes por la noche, quizá salga una reunión espontánea o el día de mañana tienes un agendada una noche que quieras que se haga eterna, y como eso no puede ser, al menos te recomendamos que la hagas inolvidable.
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Para lograrlo, basta con que tus invitados se sientan agasajados en 3 aspectos:
Comida
Bebida
Música
Por esta ocasión y para empezar, queremos que estés conciente de las combinaciones correctas que debes ofrecer según el vino que servirás o las botellas que amablemente leven a tu casa.
Que los invitados no te agarren desprevenidos, esto es lo que debes tener en tu tabla de quesos:
Vinos tintos robustos
Acompáñalos con esos quesos intensos, fuertes los Azules, Roquefort, Cabra, Stilton, Gortgonzola, son opción. Seguro podrás acompañarlos con tu útlima experiencia en París.
Vinos espumosos secos
Es momento de optar por quesos cremosos y suaves como Brie o Camembert.
Vino blanco
El queso gruyere es una opción indicada para el vino blanco, si tienes un Chardonay, puedes ser generoso y acompañarlo con el Parmesano de cabecera.
Vinos afrutados
El queso cheddar es un aliado para vinos como el Sauvignon Blanc.
Cabernet Sauvignon
El queso manchego complementará la fiesta en la boca de los comensales, también puedes servirlo con un queso provolone.
Merlot
Si el Merlot es una de tus elecciones, el queso gouda es indispensable en tu mesa.
Vinos Bourdeux, Shiraz y Zinfandel
Un queso asiago será un detalle apreciable a la vista y gusto de tus comensales.
Si piensas acompañar el momento con cervezas, puedes decididir por unas alitas, surimi, o carne seca. Recuerda que si servirás embutidos debes ofrecer al menos 2 opciones, además de agregar pan tostado o rodajas de pan.
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