Ser un hombre tímido no es «malo», en realidad, nuestra personalidad no tiene por qué calificarse como buena o mala, nuestra esencia es completamente válida.
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Según la RAE, la palabra tímido o tímida, viene del latín timĭdus y es un adjetivo para decir: Temeroso, medroso, encogido y corto de ánimo.
Eso según la RAE, a nuestros ojos es en una definición muy básica, que se encarga de describir la palabra en un sentido llevado al límite.
Sin embargo, desde una perspectiva más humana o psicológica, puede haber niveles o dimensiones de timidez: bajo, medio, alto y extremo, por ejemplo.
En esta ocasión, nosotros queremos abordar lo que pasa un hombre tímido en las relaciones personales, en un nivel medio.
Así que, si te consideras medio tímido, sigue leyendo.
Ventajas y desventajas de ser un hombre tímido en las relaciones personales
Queremos recalcar, no estamos juzgándote, sólo queremos que lo consideres por si eso te ayuda a relacionarte mejor de forma afectiva.
Ventajas
1. Tu timidez puedes generar confianza en la otra persona.
2. Puede resultar una cualidad interesante pues un hombre tímido puede ser selectivo al elegir sus amistades, ellos serían elegidos por ti.
3. La gente que se acerque a ti puede hacerlo con intenciones genuinas de conocerte. Por lo tanto, podrás confiar en que quieren algo bien.
4. Las personas que quieran conocerte y salir contigo no tendrán prejuicios en que tú te abras a tu ritmo, así que puedes estar tranquilo en ser tú mismo y darte poco a poco a la relación.
Desventajas
A) Hay gente que no encuentra atractiva a las personas tímidas pues prefieren alguien con quien la comunicación pueda darse de forma rápida, fluida y sin barreras.
IMPORTANTE: Esto no tiene nada que ver con tu valor, sólo con las preferencias de las otras personas.
B) Algunas personas podrían acercarse con malas intenciones, por ejemplo, burlarse o ganar tu confianza para después salir con algo absurdo. Esto suele suceder cuando las personas disfrutan del «poder» o «superioridad» que sienten al «dominar» a otra persona.
C) Puedes caer en el error de actuar según tus inseguridades y dejar que tu personalidad tímida lidere en los momento menos adecuados para tus objetivos y sueños.
D) La timidez puede hacerte perder mucho tiempo intentando cumplir tus metas, puede ocasionar que los pasos que des hacia tus metas sean lentos, incluso, que de vez en cuando retrocedas.
En la cama…
Si la timidez llega a la cama, incluso, se origina ahí, necesitas trabajar en tu seguridad, prejuicios y relación de pareja.
La intimidad no se limita por el tamaño de tu miembro, sino en la pasión que le pones al encuentro, la conexión afectiva, la comunicación, la disposición que tienes para sentir tu placer y el de tu pareja, el manejo del erotismo más allá de la penetración…
En conclusión
Ser un hombre tímido no debería ser un problema en las relaciones personales, así como hay desventajas, hay ventajas y está en ti que la moneda siempre caiga a tu favor.
Trabaja en tu seguridad, en tu intuición, en tomar decisiones con sabiduría, en aprender de tus errores y en considerar que lo que los otros decidan habla de sus preferencias, no de tu valor.
Es decir, una persona con valores no te será infiel porque tú seas tímido, será infiel porque así lo decidió.
Sin embargo, aunque no sea tu tarea llenar las expectativas de otros, estar en una relación implica interés, comprensión e interacción con las necesidades afectivas de la otra persona.
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