A veces cuando un hombre se enamora con locura, toma decisiones equivocadas para complacer a su pareja.
Cree que mientras más satisfacción, atención, interés y amor le dé, ella querrá estar más a su lado, pero no siempre es así.
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Incluso no es sano para ti ni para su relación, ya que ella podría aprovecharse de tu falta de amor propio y sacar ventaja de la situación.
Hay cosas que un hombre enamorado no debe hacer nunca por su propia felicidad e integridad y menos para complacer a alguien que no vale la pena.
Amar no se trata de hacer cualquier cosa por el ser amado. Tu autoestima, dignidad, valores y felicidad nunca deben estar en juego por un mal amor.
En realidad, no puedes amar de la forma correcta si no te amas a ti mismo.
3 cosas que un hombre enamorado no debe hacer para complacer a su pareja
1. Creer ciegamente en ella.
Sí, para que una relación funcione debe existir confianza mutua, pero no debes cegarte y creer en todo lo que te diga.
Por ejemplo, si ella te dice que tú no puedes vivir sin su amor o que la necesitas para ser feliz, está en un error.
No tienes que creerle todo, aunque ella sea una buen mujer. El respeto mutuo es la mayor prueba de amor.
2. Cambiar radicalmente para enamorarla.
Es bueno que te preocupes por ti, no solo por tu apariencia física también por tu salud mental y emocional.
Pero no es nada bueno que lo hagas porque te sientes inseguro y quieras ganarte su corazón.
Debes saber que el atractivo físico atrae, pero no enamora. Una mujer puede estar detrás de ti, solo por interés o vanidad.
Pero si tu autoestima es baja, si no te ocupas de tu felicidad y no construyes tu amor propio, se va a aburrir.
3. Renunciar a tus sueños.
Algunos hombres renuncian a su trabajo solo porque a su pareja no les gusta o no confían en las compañeras de trabajo.
Renunciar a tu vida profesional es una de las cosas que un hombre enamorad no debe hacer para complacer a su pareja.
Un hombre que no hace lo que ama, que no es libre para decidir su vida, no es feliz.
A quien más tienes que amar es a ti mismo, a quien más tienes que dar gusto es a ti mismo.
Si a ella no le gusta que cumplas tus sueños, que trabajes y seas mejor persona, es porque no te ama de verdad.
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