Ya que conoces la corbata que debes usar en cada momento de tu vida, es momento de saber como lavarla sin que se te deslave el color ni se desgaste la tela.
Primero te diremos sus cuidados de acuerdo a su material:
Seda
Este material es muy propenso a la pérdida de color y a teñir el agua, por ello no debe lavarse con otras prendas. Las corbatas de seda es mejor que sean lavadas por expertos. Si quieres correr el riesgo de hacerlo por tu cuenta debes lavarla a mano, con agua fría y con un detergente que sea amigable con la seda. No debes tardarte más de 5 minutos en lavarla pues el agua y este material no se llevan mucho.
Lana
La mayoría de los materiales de la lana (cashmere, angora, entre otras) se encogen al lavarse. Esto sucede por 2 razones: agitación y exposición a diferentes temperaturas del agua. Por ello también deben lavarse a mano, con agua y debes usar un detergente para telas suaves como algodón.
Ya que te contamos los que necesita cada tela, te diremos que hacer con los diferentes tipos de manchas:
Comida o salsa
Antes de echarle cualquier limpiador o inclusive agua, trata de remover lo más que puedas de la mancha con una servilleta o papel si recién acaba de suceder. Si quedaron residuos en seco quítalos con tus uñas para que talles lo menos posible tu corbata al momento de lavarla. Recuerda nunca frotarla o tallar mientras la mancha esté fresca ya que sólo conseguirás que entre más en la tela.
Residuo de grasa
Ya quitaste la comida pero aún quedó una molesta mancha de grasa en tu corbata. Si te sucedió en la hora de comida de la oficina y tienes una reunión importante o no quieres que se vea la marca, aplica dos gotas de gel anti bacterial para que la grasa no se adhiera a la tela. Cuando llegues a casa lávala de acuerdo al tipo de textura que tenga.
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