La resiliencia consiste en asumir las situaciones de riesgo y sobreponerse a ellas. Por esto las personas maduras actúan como tal cuando aprenden esta lección de vida.
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La principal característica de una persona resiliente es que es más feliz, pues tiene la capacidad suficiente para enfrentar el dolor y salir bien librado de él, por lo que su autoestima y estilo de vida son mejores.
Aprender estas claves de la resiliencia te harán ganador en cualquier situación.
1. Confianza.
Se basa en la seguridad que tienes en ti mismo y en la creencia de tus virtudes, pues eres consciente de lo que puedes soportar.
2. Mejor actitud.
El sentido del humor es básico en tu vida, ves las cosas con mayor perspectiva.
3. Manejo de la presión.
Eres la persona que más control tiene en momentos de estrés y presión, pues te mantienes con los pies sobre la tierra.
4. Autocontrol.
Se tiene un 100% control de las emociones, no permites que tus sentimientos te jueguen una mala pasada.
5. Acepta los errores.
Sin ellos el éxito no tendría el mismo sabor.
6. No a las emociones negativas.
No hay tiempo para ellas, pues sabes que solo juegan con tu mente y te restan confianza.
7. Saca lo mejor de ti.
En aquellas situaciones en que todo va mal, sobresalen tus mejores habilidades y no te apagas ante los problemas.
8. Siempre creciendo.
Por más adversidades que existan nunca dejas de crecer, los problemas y obstáculos solo son retos por superar.
9. El presente es el momento perfecto.
No más preocupaciones por lo que ya fue, hay que disfrutar del hoy.
10. Consciencia.
Tu mente, cuerpo y espíritu están en total control.
Ser una persona resiliente orientará tus objetivos, pues sabes a dónde quieres ir y qué quieres lograr. Siendo que reconoces las adversidades que pueden surgir y estás preparado para afrontarlas.
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