Si crees que ya no es necesario ser un caballero para conquistar, obtener lo que deseas o destacar, te estás equivocando y mucho.
Hay hombres que nacen siendo un caballero y otros pulen sus cualidades, talentos y habilidades para serlo. Algunos otros lo intentan, pero se quedan en el camino por falta de voluntad.
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Para lograr serlo o asegurar que lo eres, necesitas trabajar en tus virtudes, pero también en tus defecto.
Porque un caballero no es perfecto, pero tampoco es una mala persona que solo busque brillar para opacar a otros.
Tampoco lo es el que tiene más dinero, estilo, mujeres o contactos, sino el que deja más huella en la vida de las personas.
Si quieres descubrir si eres uno o estás en camino de serlo, debes hacer esto para lograrlo:
15 acciones que te convierten en un auténtico caballero
1. Respeta el tiempo de los demás.
Un caballero tiene presente que el tiempo es oro, es demasiado valioso para estarlo desperdiciando o provocar que otros lo pierdan.
Por esto, siempre es puntual, cortés y directo, para evitar que se pierda en cosas insignificantes.
2. Siempre mantiene la cabeza en alto.
Los fracasos no lo limitan ni lo detienen, por más veces que se equivoque, él está dispuesto a levantarse y seguir adelante.
Siempre tiene la frente en alto, porque sabe que aún puede dar más.
3. No busca atención, sino respeto.
No es alguien que necesita la aprobación de los demás y menos busca llamar la atención de una forma vacía.
Prefiere ser alguien que inspira confianza, es seguro de sí mismo y le da lo mejor a quién le da lo mismo.
Busca ser respetado, no venerado.
4. Carga actitud, no falsedad.
En todo momento es el mismo, no finge ser alguien más ni tampoco quiere cambiar para ganar. Prefiere abrazar sus errores y defectos, que fingir algo que no es.
5. Agradece.
Siempre acepta los grandes o pequeños regalos que la vida le da y también lo que le ofrecen las personas que quiere.
No da nada por hecho, por esto, siempre agradece a las personas que lo valoran y apoyan en todo momento.
6. Presta atención.
Un caballero siempre está dispuesto a dedicar tiempo de calidad, no importa si son 5 minutos o 3 horas, él pone toda su atención en lo que hace o a la persona con la que se encuentra.
Estar con el celular, no mirar a los ojos o prestarle atención a cosas tontas, no va con él.
7. No se mete en controversias.
Los chismes y rumores no van con él, prefiere mantenerse al margen de los problemas que no son suyos.
No se enfoca en el qué dirán y tampoco quiere “ganar puntos” a costar de hablar mal de los demás.
8. Es firme.
No necesita ser el más fuerte para hacer respetar su decisión. Cuando algo no le gusta lo deja claro de una forma respetuosa y amable.
Está dispuesto a dialogar y ceder si está equivocado o entiende los puntos del otro, pero jamás se doblegará solo para ganar aprobación.
9. Sabe disculparse.
Un caballero se hace responsable de sus actos. Por esto, sabe aceptar cuando se equivoca, y pide perdón de una forma sincera.
No lo hace por obligación, sino porque sabe que es lo correcto.
10. Se siente seguro de sí mismo.
Él tiene claro lo que quiere, es y tiene. Se sabe respetar y valorar en todo momento. Por esto, no permite que nadie pase sobre él o quiere hacerle creer lo contrario.
11. No promete, cumple.
Para él las promesas no valen la pena, no es que no tenga palabra, sino que prefiere demostrar las cosas con acciones.
Incluso, no promete cosas que sabe que no podrá cumplir, prefiere sorprender y hacerlas porque quiere, no porque está obligado.
12. Su trabajo habla por él.
No necesita estar gritando o llamando la atención para que otros lo valoren o lo vean, él se da a notar gracias a su arduo esfuerzo y su trabajo constante.
13. Sabe cuándo hablar.
Sabe cuándo dar su opinión y cuando ahorrarse sus comentarios. No es una persona inoportuna ni tampoco quiere tener la última palabra.
Habla para defender su punto de vista y calla cuando no es su momento.
14. No se deja manipular.
Los manipuladores no pueden con un caballero, porque él puede ver sus intenciones claras, por esto, se aleja de gente tóxica o que quiere dañarla.
No por miedo, sino porque tiene claro que no valen la pena.
15. Valora y cuida a la mujer que está a su lado.
Un auténtico caballero cuida a la mujer que ama, la respeta, le da su lugar y la valora. Tiene muy claro que ella es su apoyo e inspiración.
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