Dicen que la primera impresión jamás se olvida y podemos afirmar que tienen mucha razón. Porque la gente te recordará por cómo la hiciste sentir la primera vez que te vio.
Sí, esto parece algo injusto, pero es una triste realidad con la que tenemos que aprender a lidiar.
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Lo primero que debes saber es que dejar una buena impresión no es igual a complacer y menos a cubrir expectativas, sino a destacar lo mejor de ti y obtener más oportunidades de éxito.
Y esto lo puedes lograr si utilizas ciertas tácticas o aprovechas el poco tiempo que tienes para presentarte como un hombre admirable.
A continuación, te decimos qué debes hacer para que la gente tenga una buena impresión y seas memorable:
Esto te ayudará a dejar una buena impresión y a que no te olviden
1. Confianza.
Es momento de dejar las inseguridades a un lado y enfocarte en tus cualidades; ¡ojo!, no se trata de negarlas, pero tampoco de ponerlas como carta de presentación.
Para dar una buena impresión debes confiar en ti, en tus habilidades, talento y en lo que eres.
Y para lograr esto debes mostrar confianza, dando un saludo firme, tener la espalda recta y la cabeza hacia al frente.
Si te encorvas o tienes la mirada en el suelo solo demostrarás inseguridad y falta de talento.
2. Mirada profunda.
Muchos creen que serán memorables si intimidad a la persona con la que hablarán, pero esto es un error.
Lo mejor es inspirar confianza y amabilidad, por lo que lo lograrás si lo miras a la cara, sonríes y escuchas con atención.
Necesitas asentir y evitar interrumpir, para que así puedan tener una plática más amena y seas visto como alguien respetuoso y atento.
3. Identíficate con claridad.
Deja a un lado el “hola, que tal” o “mucho gusto” y entra con un saludo cordial y enseguida menciona quién eres.
Por ejemplo: Buenas tardes, soy Juan Pérez y soy el gerente de este lugar. No se trata de presumir, sino de presentarte de la forma correcta.
Esta es una forma de que muestres tu talento y dejes claro tu poder, porque si solo te enfocas en adular o caer bien, pasarás desapercibido.
4. Menciona algo en común.
Si quieres tener una conexión más profunda con esa persona o que empatice contigo, obsérvala con cuidado y apunta a algo que tengan en común.
Incluso, si en la plática menciona que le agrada practicar algún hobbie que a ti también te guste, úsalo a tu favor.
La clave está en que uses algo que sea real y no inventes que todo lo que hace esa persona te agrada, porque te descubrirá y te dejará mal parado.
5. Dale oportunidad al otro.
Esta es una de las cosas que más te ayudarán y es que permitas que esa persona también brille y no trates de opacarla.
Pregunta y escucha atentamente. Ya que, si lo haces sentir importante, inteligente y hasta feliz, estará más dispuesto a conocerte y hacer lo mismo por ti.
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