Thomas C. Curly pasó los últimos 5 años de su vida estudiando a los millonarios en Estados Unidos. Durante todos estos años se dedicó a compilar información sobre su estilo de vida, sus hábitos y lo que hace que sean personas con un ingreso extraordinario.
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Thomas descubrió que todos estos millonarios self-made tienen hábitos muy específicos que aprendieron de sus padres, y el profesor Nicolas Christakis de Yale confirma su teoría. Él también ha encontrado, después de muchos años de investigar el comportamiento humano, que los hábitos son contagiosos, buenos o malos.
Por ejemplo, si tu familia es obesa tienes 25% más probabilidades de ser obeso que si hubieras crecido en una familia delgada. Si tus papás fumaban, probablemente termines fumando o si tus papás hacían ejercicio es más fácil que tú hagas ejercicio.
Siguiendo esta línea de investigación, estos son los 10 hábitos que los millonarios tomaron de sus padres y que son cruciales para que sus cuentas de bancos tengan más de 6 ceros en ellas:
Construyen su propia vida
Todos los millonarios que han construido su propia fortuna (es decir, que no heredaron de papá), aprendieron que ellos son los arquitectos de su propia vida y que son los únicos responsables de que las circunstancias que te hacen rico o pobre.
Se hacen responsables cuando algo no funciona
Cuando eran chicos no les era permitido jugar a ser víctimas. Ellos saben tomar responsabilidad de lo bueno y lo malo que les pasa en la vida y no culpan a nadie más que a sí mismos cuando algo sale mal.
Respetan las leyes
Estas personas crecieron con papás que respetaban las leyes y aprendieron a hacerlo igual. Esto significa que sus papás siempre pagaron sus impuestos a tiempo, nunca se pasaron un rojo y jamás dieron una mordida.
Explotan sus talentos natos
Cuando eran niños, los millonarios de hoy fueron expuestos no a una ni 2 clases extra curriculares, tomaron 25. Siempre estuvieron expuestos a nuevas actividades hasta que descubrieron para qué eran buenos. Muchos papás ponen a sus hijos en la misma actividad durante 10 años y los niños son buenísimos para el fútbol, saben jugar en equipo y meten gol, pero jamás exploraron más talentos. En cambio, estos chicos exploraron sus habilidades en diferentes campos y ahora se las ingeniaron para usar sus talentos natos para hacer dinero.
Cuando ganas dinero por hacer algo que amas, tu trabajo se convierte en tu pasión y tu motor de vida. De ahí al éxito millonario hay un paso.
Persiguen sus objetivos
61% de los millonarios estudiados eran «obligados» a mapear sus sueños, es decir, crearon desde chicos un guión mental de cómo sería su vida perfecta. Esto se convirtió en un mapa del éxito.
Muchas personas fracasan porque su definición de meta es errónea, a ellos se les enseñó a vivir persiguiendo un objetivo fijo, como ganar 100 mil pesos al mes. 97% de los millonarios aprendieron que una meta requiere acciones físicas y que todas deben ser 100% medibles y alcanzables, es decir, que debes tener un set de habilidades y conocimientos para llegar a esa meta. A 80% les enseñaron a enfocarse en una meta final a largo plazo y trabajar hasta alcanzarla.
Estas personas entienden que los sueños y las metas no son lo mismo. Para triunfar debes crear metas alrededor de tus sueños y cuando cumples con cada una de esas metas habrás logrado cumplir tus sueños.
Saben que el dinero es algo positivo
97% aprendió que la gente con dinero es buena, honesta y trabajadora. Su concepto de riqueza no es el de personas amargadas o envidiosas, sino de personas que han trabajado toda su vida para tener lo que tienen y entienden que el dinero sí compra cosas que se disfrutan.
Trabajan por lo que quieren
Desde los 9 o 10 años trabajan para comprar las cosas que quieren, es decir, sus papás nunca les han regalado nada. 55% de estos millonarios empezaron trabajando 10 horas o más al mes desde muy temprana edad, ya fuera en tareas en casa como regar o podar el pasto, hasta ayudar a sus papás en despachos sacando copias o repartiendo periódicos.
Respetan a los demás
Sus papás les enseñaron a respetar al otro, desde tu trabajo hasta sus propiedades.
Viven en constante mejora
80% tenían que leer libros de autoayuda o educacionales por lo menos 30 minutos al día. 54% tenían que aprender nuevas palabras para expandir su vocabulario. 68% siempre supo que tenía que ir a la Universidad. Es decir, estas personas entienden la necesidad de seguir creciendo, seguir estudiando, seguirse mejorando todos los días de su vida. Innovar o morir.
Usan el tiempo de manera productiva
Los papás de las personas millonarias nunca les dieron la oportunidad de perder el tiempo. Estos eran niños que tenían actividades extra escolares toda la tarde y luego leían un libro y luego jugaban con Lego’s, no con PlayStation.
¿Qué otro hábito te gustaría enseñarle a tus hijos?
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