Tenemos que advertirte que es una teoría polémica, sin embargo, parece tener sus bases fundamentadas.
El hecho de que hombres con poder adquisitivo tengan muchos hijos está relacionado a su estabilidad económica y a la intención de dejar descendencia que continúe con su estatus, señala la hipótesis de Trivers-Willard.
Uno de los factores que se relacionan con lo anterior es que el estatus social es una cualidad que las mujeres encuentran atractiva, además hay estudios científicos en donde se asegura que las mujeres fértiles prefieren a hombres dominantes.
Esto se traduce en que los hombres millonarios tendrán mayores opciones y facilidades para escoger pareja, se casarán más jóvenes y tienen mayor número de experiencias extramaritales, lo que implica una posibilidad de tener más hijos.
En cambio un hombre que no tenga tantos bienes, no será tan atractivo, si eres un hombre en la parte inferior de la escala vas a tener dificultades para encontrar a alguien para casarse», opinó Trivers, uno de los creadores de la hipótesis surgida en 1972.
Existe otro factor que está relacionado y es que, en general, los hombres son más propensos a sufrir enfermedades, por lo que gracias a la teoría de la selección natural junto a una situación económica de bajos recursos, se beneficiaría a los padres con hijas debido a su resistencia, es decir, las condiciones desfavorables predisponen a las mujeres a tener más niñas.
Los autores reconocen que estas circunstancias podrían sonar sexistas, sin embargo, existen estudios con animales en vida salvaje donde se refuerza esta idea, por ejemplo, ciervos rojos y gorilas machos pueden tener harenes de hembras, mientras que los machos bajos o débiles nunca pueden reproducirse.
En conclusión, padres en buenas condiciones económicas invierten más en su descendencia de sexo masculino mientras que las padres en condiciones económicas desfavorables invierten más en las chicas.
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