Existen hábitos que te roban energía y necesitas borrarlos de tu vida pues no sólo pueden desanimarte a nivel físico, tu mente y emociones pueden sentirse desalentados ante su presencia.
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1. Sobrecargarte.
Sí, puedes ser muy bueno en todo lo que haces pero, ¿hasta qué punto te la vives obligado a poder?
Revisa cuál es el objetivo de que estés tan lleno de actividades, obligaciones o tareas, si es por demostrar tu capacidad o la extenuante vida ocupada, o en el fondo es una necesidad de la que por ahora no puedes escapar.
2. No dormir lo suficiente.
No descansar bien es un factor para subir de peso y perder dinero, pero, también es una señal de qué tanto le das a tu cuerpo lo más básico (y gratis) para mantenerlo sano.
¿Qué otra cosa podría robar energía si no es priorizar el descanso?
3. Tomar todo personal.
El mundo no gira alrededor de ti, sino del sol.
Es sano poder ir por la vida sin adjudicarte que las cosas salen, se hacen o no, por ti. La gente actúa con lo que lleva adentro en su estómago, mente y corazón, no necesariamente por ti o contigo.
4. Saltarse comidas.
El alimento es nuestra fuente primaria de energía, no comer es castigar a nuestro cuerpo, comer inadecuadamente es ignorar sus necesidades.
Saltarse comidas no logra dar ni un buen resultado lo intentes como lo intentes. Escucha y ama a tu cuerpo. Reflexiona que no se trata de no darle de comer, sino de saberlo nutrir.
5. Pensar de más.
También llamado Overthinking, es el arte de hacerte embrollos en la cabeza, pensar y repensar lo que al final ni se concreta y mientras intervino en tus estados de ánimo o decisiones.
6. Involucrarte en asuntos que no son tuyos.
Hay quien vive creyendo que le atañe todo lo que ocurre a su alrededor y la verdad es que no es así.
Las decisiones, actitudes, pensamientos y actos, de otras personas, por muy cercanas que sean, sólo son de esas personas.
Por salud mental, uno sólo debe enfocarse en sus propias decisiones, actitudes, pensamientos y actos.
7. Quejarte todo el tiempo.
No hay algo más desgastante que exponer tus inconformidades sin hacer nada para resolverlas.
Está bien hablar con franqueza y decir lo que no nos parece, pero debemos tener presente cuando una opinión se convierte en una queja y cuando esto se convierte en nuestra personalidad.
Borra de tu vida estos hábitos que roban energía, enfócate en ti, en tus planeaciones, en tu administración, en tu bienestar y deja que tu éxito se construya con pasos cortos pero firmes.
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