¿Por qué irías a una fiesta a la que todos pueden entrar cuando puedes ir a una fiesta a la que sólo unos cuantos fueron invitados?
Esa es justamente la pregunta que se están haciendo todos en Nueva York cuando alguien dice que sigue usando Tinder. ¿Por qué seguirías usando la dating app que usa todo, y literalmente, todo el mundo, cuando puedes estar usando Raya?
Y se desata la obsesión…
Para entrar a Raya, una dating app que se lanzó al mercado en marzo de 2015, necesitas aplicar y tener un “very impresive” Instagram para que cuando el comité anónimo evalúe tu solicitud le parezca que eres lo suficientemente interesante como para pertenecer a este VIP club.
Los que se burlan (o los que no fueron aceptados) se refieren a Raya como el “Tinder Illuminati”, pero los que son parte de la selecta lista de perfiles lo consideran EL lugar en el que sólo está la gente cool de la sociedad (AKA not basics).
Si lograras acceso a Raya podrías conseguir una cita con Joe Jonas, Kelly Osbourne, Matthew Perry, Elijah Wood o Moby, aunque en realidad las celebridades no son lo más interesante de la lista.
Raya está pensado para conectar personas creativas e influyentes en muchos aspectos, no únicamente en Hollywood. De hecho, el común denominador de los seleccionados es que tengan una carrera creativa y la capacidad de cambiar su entorno con ella.
Además de modelos, fotógrafos, fashionistas, lifestyle bloggers, beauty editors y demás influencers que dominan las redes sociales.
Pero la gente no es lo único… Raya te muestra usuarios de todo el mundo, no sólo de 3 km a la redonda, así que no estás obligado a salir con la gente que vive cerca de ti. ¿Y si el amor de tu vida vive en Londres?
Y es que los usuarios de Raya son ciudadanos del mundo que lo mismo amanecen en Berlín y duermen en Nueva York. Y por supuesto, tomar un avión para conocerse no es ningún problema.
Muchos han expresado su odio a Raya, y no están tan equivocados. Los haters dicen que una app así de elitista es un retroceso en temas de tolerancia y civilidad. Sin embargo, los usuarios regulares y felices dicen que es mucho más fácil encontrar gente con la que sí puedes entablar una relación si el catálogo es más selecto y con estilos de vida similares.
En Raya no se trata de cómo te ves o cuánto dinero tienes, sino de qué tan creativo y versátil eres para pasar por el filtro que determina tu nivel de «coolness».
Es una app para gente que tiene ciertos privilegios y le gusta explotarlos. Y a la que le gusta rodearse única y exclusivamente de gente igual, con la misma estética y los mismos valores.
Para los que no han podido entrar, Raya es como regresar a la prepa, en la que la jerarquía estaba determinada por la popularidad y la cantidad de gente a la que saludabas en los pasillos. Es una app que une a los que son lo suficientemente guapos, millonarios y bien vestidos.
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