Si hay un vino que debemos probar al menos una vez en la vida, ese sin duda es el Screaming Eagle.
Y no sólo lo decimos por su fama de ser considerado el más caro de Estados Unidos, sino también por su alta calidad y su limitada producción.
Pero empecemos por lo primero. Este delicioso elixir es producido por la bodega del mismo nombre (Screaming Eagle), situada en el condado de Napa, en el estado de California, y fundada desde 1989.
Sobre su precio podemos decir que por una sola botella se ha llegado a pagar 4.893 dólares, y siempre sus ventas superan el valor de 1.087 dólares.
Y es que, antes de su comercialización, este vino ya era un éxito. Lo decimos porque la bodega puso en ese momento una lista de espera para las personas que quisieron degustar las 7.000 botellas previstas para su primera producción.
Sobre sus cualidades, los expertos lo resumen con estas palabras: es un vino de intensa pureza, equilibrio, texturas suaves y de carácter único y refinado.
Finalmente, como dato curioso, queremos mencionar que los vinos de California empezaron a arrasar en los concursos internacionales desde 1976, e incluso lograron superar algunas producciones francesas.
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