El cáncer de mama no le pasa desapercibido a nadie. Afortunadamente se ha hecho tanto ruido en los últimos años que poco a poco las mujeres han aprendido a estar alerta a las señales y detectarlo a tiempo.
Sin embargo, cada año nos damos cuenta de que, aunque sentimos que avanzamos kilómetros, los números nos demuestran que sólo hemos recorrido un centímetro.
El cáncer de mama es el cáncer más común en las mujeres de todo el mundo y está aumentando especialmente en los países en desarrollo, donde la mayoría de los casos se diagnostica en etapas tardías. Este cáncer representa 1 de 4 de todos los cánceres en mujeres en todo el mundo, y se sigue diagnosticando tarde.
Aproximadamente 1 de cada 8 mujeres padecerán cáncer de mama a lo largo de su vida, por eso sigue siendo fundamental la campaña que se hace cada 19 de octubre. Necesitamos no sólo saber que existe, necesitamos aprender a detectarlo a tiempo para que esta enfermedad no consuma nuestras vidas ni la de nuestras familias.
Son muchas las marcas que se unen a esta lucha y que cuelgan un listoncito rosa en sus empaques. Pero desde 1992, The Estée Lauder Companies lleva la batuta con su Campaña de Concientización sobre el Cáncer de Mama (BCA), la iniciativa filantrópica corporativa más grande de esta compañía.
Evelyn H. Lauder lanzó la Campaña BCA en 1992 con la creación del Listón Rosa, el símbolo universal de la salud de las mamas.
La misión de su campaña es vencer al cáncer de mama mediante el apoyo a la educación y la investigación médica, yendo a la raíz del problema y atacándolo desde los laboratorios y los microscopios.
Los últimos 24 años The Estée Lauder Companies ha liderado el movimiento rosa, reuniendo embajadores, fondos, familias, y demás actores para inspirar acciones significativas en esta lucha. Desde que Evelyn H. Lauder lanzó el listón rosa, el mundo entero la ha seguido.
Esta campaña une a las 15 marcas icónicas de la empresa para recaudar fondos a través de donativos y como resultado de la venta de sus productos con listón rosa. Además tiene iniciativas de sensibilización, educación y recaudación de fondos a nivel mundial, involucrando a sus empleados, socios y clientes.
La Campaña BCA es la responsable de que los edificios más emblemáticos del mundo se pinten de rosa durante el mes de octubre, como recordatorio de la importancia de esta enfermedad en el mundo.
A lo largo de estos 24 años se han recaudado más de $65 millones de dólares para la investigación global, la educación y los servicios médicos. Además se han fundado 200 centros de investigación BCA en todo el mundo. Este año su meta es de 6 millones más, destinados en su totalidad a la prevención y detección temprana.
El socio principal de la Campaña BCA es la Fundación para la Investigación del Cáncer de Mama (BCRF)®, una organización no lucrativa dedicada al avance de las investigaciones más prometedoras del mundo para erradicar el cáncer de mama.
Establecida en 1993 por Evelyn H. Lauder, BCRF es actualmente el mayor proveedor de fondos privados del mundo para la investigación del cáncer de mama y ha acelerado grandes avances en la prevención, diagnóstico, tratamiento y supervivencia del cáncer de mama.
Los fondos recaudados por la Campaña BCA han apoyado becas de investigación que han logrado:
• Lanzamiento de la fase temprana de una vacuna experimental para el cáncer de mama
• Formas mejoradas para evaluar el riesgo en mujeres jóvenes con antecedentes familiares
• Diseño de programas de pérdida de peso para ayudar a prevenir la recurrencia o metástasis
• Lanzamiento de un programa de supervivencia para hacer frente a los problemas cognitivos
• Diseño de una herramienta basada en sangre para detectar la metástasis antes de que pueda crecer un tumor
• Exploración de las asociaciones entre obesidad, células madre cancerígenas y la progresión de la enfermedad
Durante todo el mes de octubre, los productos de Estée Lauder que participan en esta campaña tienen un listón rosa. Si adquieres alguno de ellos tienes la seguridad de que tu donativo se va directo a BCRF.
Así es como Evelyn H. Lauder pensó que se podía combatir el cáncer de mama vendiendo maquillaje (y cremas y todas las cosas lindas de Estée Lauder)… Creando una campaña que 24 años después todos hemos hecho nuestra.
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