Tener un hijo con la persona que amas puede ser algo muy importante y hermoso, pero si lo haces antes de casarte, esto podría traerles problemas.
Y no, no queremos escucharnos exagerados o decir que deben hacerlo en cierto orden, sino que investigaciones aseguran que no es lo mejor para su relación.
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Porque tener un hijo antes del matrimonio solo provocará que lo suyo termine y dure menos tiempo, incluso que, su relación tenga muchos problemas y altibajos.
Por esto, si estás planeando tener un bebé con tu novia y aún no se han casado, deberías pensarlo mejor o saber porqué pasa esto, para que así juntos lo eviten y trabajen en su relación…
Tener hijos antes de casarse aumenta las posibilidades de separarse
Un estudio publicado en el Journal of Family Psychology, señala que tener hijos antes de casarte, eleva el riesgo de que termines divorciándote.
Los autores de la investigación no especificaron si el embarazo se produjo por decisión o fue algo que no estaba planeado. Por lo que se deduce que en ambos casos el resultado sería el mismo.
La investigación analizó a más de 400 parejas durante sus primeros cuatro años de matrimonio.
Destacando que desde el 2020, un número creciente de parejas en los Estados Unidos “están terminando su relación después de haber tenido un hijo juntos sin antes haber contraído matrimonio”.
De hecho, el número de nacimientos con madres solteras ha crecido más del doble entre 1980 y 2014, pasando del 18% al 40%, de acuerdo con datos de Best Life Online.
En la investigación se descubrió que la tasa de separación era dos veces mayor cuando el hijo llegaba antes de que se convirtieran en cónyuges, 19.1% contra un 9.5% para las parejas con hijos después de la unión.
Insatisfacción en la relación
Tener hijos antes del matrimonio está asociado a una menor satisfacción conyugal.
Ya que en la búsqueda de los motivos que llevan al divorcio por concebir antes de la unión matrimonial, los investigadores encontraron que la razón principal está relacionada a un nivel más bajo de satisfacción conyugal.
Asimismo, los expertos hallaron que la comunicación de la pareja presentaba deficiencias y no lograban entenderse. “Fue menos efectiva, menos positiva y más negativa que las parejas que contraen matrimonio sin hijos”, mencionaron.
Para concluir con la investigación, hicieron énfasis en que las parejas que fueron analizadas en la investigación estaban en la clasificación de “bajos ingresos”.
Por lo que podría mencionarse que este también es un factor importante que puede afectar el estatus emocional y comunicativo de cualquier matrimonio.
¡No se dejen para después!
La llegada de un bebé a sus vidas puede ser un momento muy especial, esperado, importante, pero también difícil y conflictivo.
Porque nadie está preparado para ser un buen padre o buena madre, vas aprendiendo en el camino.
Y si a esto le sumas que tu relación de pareja se ve afectada por este nuevo integrante y por los nuevos roles que se deben implementar, el cambio es más drástico y difícil de llevar.
Sin embargo, esto no significa que su relación tenga fecha de caducidad o que estén destinados a que lo suyo termine solo porque un hijo llega a sus vidas.
Si no que es momento de prepararse y trabajar como equipo, para que de esta manera su relación pueda superar cualquier obstáculo que se le presente.
Porque sí, deben estar pendientes de su bebé, pero también del otro, no darse por sentado o creer que su relación ya no es prioridad.
Aunque pasa a segundo plano, sigue existiendo, y si ustedes no trabajan en ella, llegará a su fin.
Pero si realmente se aman y quieren estar juntos, es momento de luchar por lo que tienen y dejar claro que un estudio no es una sentencia para su relación, sino un despertar para que lo suyo siga siendo bueno y sano.
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