Cada persona es inteligente, poderosa y tiene talento de alguna manera, sin embargo, tú te aferras y finges ser un hombre poderoso.
No es que seas un hombre mediocre o sin talento, el problema es que quieres ser alguien más y no puedes destacar lo mejor de ti.
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Te aferras a quedar bien con las demás personas, pero no te enfocas en lo que tú quieres. No eres un hombre poderoso no por falta de talento, sino por falta de valentía y seguridad.
Mientras finges en alcanzar algo que no deseas, pierdes el tiempo y el éxito.
Por esto, es importante que te des cuenta de que no estás engañando a nadie y que si sigues por ese camino, la máscara se te caerá tarde o temprano
5 señales de que finges ser un hombre poderoso
1. Quieres tener la razón todo el tiempo.
Cuando se trata de lidiar con un conflicto, las personas inteligentes escuchan los argumentos de la contraparte y están dispuestos a cambiar su opinión si es necesario.
Pueden ver que no se trata de ganar, sino de aprender algo de la situación.
Sin embargo, alguien que finge ser poderoso se aferra a la idea de querer tener la razón en todo momento.
No se esfuerza en tener argumentos válidos, cree que al enojarse y gritar, ganará la discusión.
Pero no tiene en cuenta que un hombre poderoso no necesita imponerse, sino ser respetado, tenga o no la razón.
2. Finges ser perfecto.
Una persona inteligente, profesional y genuina nunca culparía a alguien por sus propios errores. Se hace responsable y se toma sus errores en serio.
Mientras que, alguien que finge, cree que debe ser perfecto y por esto, no es capaz de aceptar sus errores.
Prefiere que los demás se compadezcan de él en lugar de admitir que se equivocó y que es humano.
3. No te importan los demás.
Una persona poderosa es alguien empático que entiende y toma en cuanta los sentimientos de las demás personas.
Dan todo, sin esperar a cambio o no lo hacen para quedar bien, simplemente les nace. En cambio, alguien que finge solo busca su propio beneficio.
No le importa pisotear a otros en el camino, si debe hacerlo no lo duda, porque creo que eso lo impulsará al éxito.
4. Crees que necesitas de fuerza para ganar.
Un hombre poderoso sabe que la fuerza, la agresividad o los golpes no le ayudaran a demostrar su poder.
Él tiene claro que tiene muchos talentos y cualidades que le ayudan a lograr sus metas.
Sin embargo, alguien que finge cree que debe dominar o humillar a los demás para demostrar su poder.
Incluso, piensa que si no puede ser amado, debe ser temido, pero está cometiendo una grave equivocación.
Porque al final del día nadie lo respetará ni tampoco querrá estar a su lado.
5. Piensas que eres el mejor.
Las personas inteligentes no le temen a la competencia. Tratan de ayudar a otros e inspirarlos para que sean las mejores versiones de sí mismos.
Tienen altos niveles de autoestima, porque saben lo que merecen, pero comparten su conocimiento con otros desinteresadamente.
Mientras que alguien que solo busca encajar y hacerle creer al mundo que tiene todo, asegura ser el mejor y saberlo todo.
Sin embargo, solo se dedican a juzgar y observar los errores de otros, pero no son capaces de ver que ellos tienen más defectos y problemas en la vida.
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