En la mayoría de los casos, ser un “soñador” o “soñadora”, se juzga superficialmente como una cualidad negativa.
Se piensa en alguien cuyos pies no están en la tierra y cuya realidad se presupone desfasada del mundo que compartimos y vemos como colectividad.
Y en efecto, puede que sea así, pero ha sido gracias a los soñadores que el planeta ha presentado múltiples evoluciones.
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Estas mentes extraen de mundos dispersos una esencia única y la comparten con la sociedad.
Actualmente existen múltiples investigaciones que muestran los beneficios de ser un soñador, así como la certeza de que ésta es una característica propia de nuestra especie.
5 razones por las que debes ser un soñador
1. Cuidas tu salud mental
De acuerdo al científico J. Singer y sus colaboradores, la capacidad de ser soñador está relacionada con la actividad mental de manera positiva, así como con una mejor salud mental y más felicidad.
Estudios basados en el placer demorado mostraron que los niños con mayor capacidad para imaginar tenían más paciencia y, por ende, podían esperar estimulaciones positivas sin estresarse.
2. Motiva tu creatividad.
Diferentes estudios han apuntado que las personas que tienen la cabeza entre las nubes son más imaginativas.
Gracias a un estudio elaborado en la Universidad de California de Santa Bárbara.
Se descubrió que las personas pueden crear soluciones viables y creativas cuando están en un entorno que favorece la dispersión mental.
Según la prueba, a los sujetos del experimento se les preguntaba qué funciones podía tener un objeto y se les pidió que las anotaran en una hoja de papel.
Posteriormente, a unos cuantos se les pasaba a una habitación con música relajante y se les pedía realizar alguna labor que provocara distracción.
Y por ende, soñar despierto, mientras que los otros continuaban en las mismas condiciones.
Luego, se les volvía a hacer la misma pregunta.
El resultado: las personas que realizaron actividades que les permitía ser soñadores tuvieron un porcentaje mayor al 40% de respuestas que sus compañeros.
3. Tienes buena memoria.
Según los estudios del departamento de Psicología en la Universidad de Wisconsin y el Instituto de Cognición Humana Max Plank, la habilidad de poder soñar despierto mejora la memoria.
No sólo permite una mayor actividad a nivel neuronal, sino que optimiza las conexiones cerebrales.
Dicho descubrimiento se dio cuando varios participantes, todos conocidos por ser soñadores.
Demostraron una mejor habilidad para recordar unas cartas al hacer ejercicios matemáticos en comparación con otros participantes que no eran soñadores.
4. Fortalece tu inteligencia emocional.
En palabras de la científica, investigadora y escritora, Mary Helen Immordino-Yang, el soñar despierto nos hace mejores personas.
Esta actividad no sólo permite que reflexionemos sobre nuestras acciones y en las consecuencias de estas, sino que también es la oportunidad para tener mayor empatía hacia otros.
Asimismo, esto significa que las personas que realicen esta actividad tendrán un mayor porcentaje de éxito en sus relaciones interpersonales.
La razón reside en que un soñador tiene mucho mayor facilidad para ponerse en los zapatos del otro.
5. Es un ejercicio de planeación.
Últimamente ha aumentado el número de investigaciones que aseguran que esta capacidad permite hacer planes a futuro.
Debido a que esta actividad es una reflexión que se realiza en solitario, muchas veces se tiene la concentración y la oportunidad para que la persona piense sobre sí misma, qué quiere y sus metas.
Esto también vuelve al individuo más asertivo y eficaz en sus labores diarias.
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