Subir tu energía ayudará a ubicar tus pensamientos en función de tus metas.
Cuando estamos enfocados en lograr nuestros objetivos mientras evadimos las pruebas de la vida, podemos permitir que por cansancio, estrés o rutina nuestra energía se opaque, nos hacemos pequeños ante las pruebas o nos ofuscamos ante las circunstancias.
Aunque es normal y está permitido, más vale sacudirnos y volver a ubicar nuestra mentalidad para que sigamos dando lo mejor de nosotros para ir cumpliendo nuestras metas.
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Tus pensamientos son tan valiosos como tus acciones, incluso los pensamientos que no culminan en una acción, pues reflejan tu mentalidad, base fundamental de tu estilo de vida y cómo te relacionas contigo y con tu entorno.
Decidimos darte los siguientes tips para mejorar tu mentalidad y subir tu energía cuando sea necesario.
1. Pon atención a la energía que emites.
Lo primero es que analices qué tipo de energía emites, ¿positiva, negativa?
Podrás notarlo al analizar el comportamiento de las personas al convivir contigo, ¿se notan en calma, en confianza, estresados, aburridos o tristes?
2. Aléjate de influencias negativas.
Existen personas que absorben o bajan nuestra energía, personas víricas (aquellas que se quejan de todo, todo el tiempo); personas cuyos hábitos reduzcan la calma o felicidad.
Sin embargo, no sólo se trata de personas, también aplica en lugares, comida o cosas que tengan un efecto desfavorable.
3. Cambia tus pensamientos.
Haz un ejercicio de introspección, mira adentro de ti y observa si estás generando los pensamientos y emociones que construyen y que te ayudan a ser productivo o te estás creando un diálogo interno como si fueras tu peor enemigo.
4. Habla con un desconocido.
Rompe la zona de confort y cruza palabra con alguien que no conozcas, puede ser una oportunidad de crecer por el mero gusto de hablar con desconocidos (algo que para muchos es un verdadero reto).
Además, platicar con alguien conlleva cambiar nuestra actitud a una más positiva.
5. Haz ejercicio.
El ejercicio es un buen remedio contra el estrés, así que de inmediato te dará energía y satisfacción contigo mismo al ir mejorando tu condición física con los logros que eso pueda representar.
Tú puedes lograr lo que te propongas pero todo empieza en tu mente, tus pensamientos y energía no deben ponerte el pie.
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