Como padres, tenemos una palabra que, en la práctica nos ayuda a disciplinar y corregir a nuestros hijos, se trata de la autoridad.
Sin embargo, no debe usarse sólo por usarse o porque nos creemos que por mayores entendemos más el mundo, ya que con el paso del tiempo vamos olvidando que desde los ojos de un niño, todo es nuevo y desafiante.
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Sí, el ser mamá o papá, conlleva tener autoridad pero si esta no se aplica de forma consciente, todo puede resultar contraproducente.
Aplica autoridad sin empatía puede generar rechazo o rebeldía
Por ello, nos pareció una excelente opción compartirte este Reel en el que se nota a un experto hablar de cómo se puede usar la autoridad con amor y consciencia.
Es el pediatra Carlos González quien lo menciona y lo retoma la cuenta de Leila Martínez, espacioneurolingüístico.
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La autoridad es como el dinero
El doctor señala que desde su opinión, la autoridad es como el dinero, «el dinero sirve para hacer muchas cosas pero si te lo gastas en tonterías luego cuando de verdad necesitas dinero para hacer algo importante, resulta que no tienes».
Es decir, esto nos pone en perspectiva que vernos autoritarios en detalles simples propios de su edad, puede quitarnos autoridad en aspectos que realmente necesitan atención.
No se trata de no corregir a las niños o niños, sino de cuidar la manera en la que lo hacemos.
Utilizar un modo más amable, en circunstancias más relevantes, en las que se explique al niño y no se le llame la atención de forma tajante es una manera en la que nuestra paciencia y voluntad requieren más esfuerzo, pero los resultados a largo plazo podrán ser más prudentes para todos.
Aprende a usar tu autoridad de forma positiva.