La friendzone es el lugar en el que ningún hombre quiera estar, es una zona de abismo conformismo, humillación y hasta de fracaso. Queríamos ser el novio, pero nos conformamos en ser su amigo.
Llegamos a ese terrible lugar debido a ciertos actos que cometidos al tratar de conquistar a la mujer de nuestros sueños.
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Esta reflexión te dará un mensaje que debes aplicar diario
Y sí, nosotros somos los únicos culpables de terminar en ese lugar, pues nuestras tácticas no fueron las mejores.
Sin embargo, si hay una luz al final del camino y si eres lo bastante inteligente puedes salir victorioso de esa zona.
Si quieres dejar de ser solo su amigo, esto es lo que debes hacer:
1. Deja de buscarla.
Lo ideal es hacerlo de la noche a la mañana, de golpe para que sienta que te puede perder en cualquier momento y que ya no estás ahí de forma incondicional.
No la llames, busques o mensajes, deja que te extrañe. Hazlo por un par de días y regresa como si nada hubiera pasado, pero ya no seas tan cercano.
No estés tan dispuesto a darle todo a la primera, deja que ahora ella sea la que te preste total atención a ti.
2. Deja de ser servicial.
Una cosa es que te comportes como el caballero que eres y otra que te desvivas por complacerla en todo momento.
Deja de ser tan lindo y sobre todo servicial con ella, dale a entender que hay un límite de amabilidad y respeto.
Y principalmente déjale claro que solo puedes ser tan galante con tu pareja, que las cosas con una amiga son diferentes.
3. Aprovecha tu posición.
Es decir, si ya jugaste el papel de “amigo” es momento de aprovechar toda la información que te dio.
Desde repeler a sus conquistas hasta hacer esos cambios que tanto te hacen falta. El punto es que resaltes tus atributos para que ella pueda verlos y no finjas o cambies radicalmente.
4. Ten otros intereses.
Recuérdale que no estarás dispuesto a darle todo a alguien que no lo aprecia o que no muestra ningún interés.
Enfócate en dejar de prestarle atención a todo lo que ella hace y busca nuevos pasatiempos, actividades y hobbies, no mujeres.
5. Déjala ir.
Ve por ella y atrévete a confesarte de una vez por todas, sé claro y dile que no estás dispuesto a seguir fingiendo ser su amigo cuando deseas que pase algo más.
Si ella no te acepta, es el momento de dejar atrás esa amistad, no regresar a ser paño de lagrimas ni la persona que siempre esté ahí cuando ella quiera.
Compórtate como un caballero en todo momento y deja claro que está vez te tocó perder, pero que habrá alguien más que sí sabrá valorarte.
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