Un manipulador es una persona que busca aprovecharse de otra, solo piensa en sí misma y cada acción que realiza la hace por conveniencia.
Tal vez, creas que no son parte de tu vida, los sabes controlar o puedes identificarlos a la perfección, pero podrías equivocarte y mucho.
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Mientras tú crees que haces lo mejor para ti y por el bien de tu éxito, tus acciones están dirigidas a controlar a los demás y quitarles lo mejor de ellas.
Es decir, eres un manipulador que se aprovecha de la felicidad o el trabajo de otros y te cuelgas éxitos que no son tuyos.
Estás tan cegado que no puedes darte cuenta de que nadie confía en ti, te huyen o se alejan de ti, no te respetan ni te temen, simplemente no quieren desgastarse con alguien que no vale la pena.
Así que, es momento de cambiar tu actitud y darte cuenta de que siendo un manipulador no llegarás a ningún lado:
10 cosas que te ayudarán a dejar de ser un manipulador
1. Reconoce que lo eres.
El primer paso para resolver un problema es reconocerlo, así que, date cuenta de que has vivido en una burbuja y que has hecho actos a tu conveniencia.
Sí, hiciste mal, pero ahora estás dispuesto a cambiar, pedir perdón, resolver el conflicto y tomar una mejor actitud.
2. Sé más empático.
Es momento de pensar en alguien más que no seas tú y darte cuenta de que el mundo no gira a tu alrededor y que tampoco eres el centro de atención.
Sí, tienes cualidades, pero también defectos, así que no eres perfecto, porque nadie lo es.
Es importante que ponerte en los zapatos de tus conocidos y ver que ser un manipulador está afectando su vida, pero también la tuya.
Olvidarte por un momento de ti, podría abrirte más y mejores oportunidades.
3. Acepta un no.
Entendemos que recibir un sí siempre será un impulso y una fortaleza, pero de un no puedes aprender, mejorar y recordar que necesitas esforzarte más.
Un no, puede cerrarte algunas puertas, pero también te puede inspirar a buscar otras oportunidades.
Así que, acepta un no como un verdadero hombre.
4. Esfuérzate más.
Muchas personas tienen la necesidad de manipular a los demás porque no tienen un talento y quieren aprovechar el de otros o no se esfuerzan lo suficiente para lograr sus metas.
Cualquiera que sea tu caso, es momento de trabajar más en ti y en tus cualidades.
Porque tienes muchos talentos, pero probablemente no te has atrevido a destacarlos.
5. Sé un aliado, no un enemigo.
Ser un manipulador solo provoca que las personas te odien o te vean como un amigo, te alejarán y te pondrán un límite para que no afectes su vida.
Y esto no te ayudará a nada, solo te cerrará oportunidades.
Mejor enfócate en convertirte en una mejor persona, alguien digna de confianza y un aliado de apoyo.
Si solo buscas aprovecharte de los demás, terminarás sin nada.
6. Valora y agradece.
Las personas están para apoyarte no para servirte, así que, no des nada por hecho y agradece que te ayudan y apoyan.
Porque no todas las personas le dan lo mejor de sí a cualquiera, sino solo ofrecen lo mejor a alguien que sí vale la pena.
7. Respeta la opinión de los demás.
Si no compartes la opinión o los gustos de alguien, no trates de cambiarlos, escucharlos y trata de entenderlos.
Querer cambiarlos a tu conveniencia no te ayudará a nada, porque solo se estarán adaptando a algo sin entenderlo.
Al final, se irán con un mejor postor.
8. Sé una mejor persona.
No quieras ser como alguien más, tal vez, si eres un manipulador fue porque querías imitar a otra persona o querías tener lo que tenía.
Sin embargo, copiar o imitar a alguien solo te convierte en una persona falsa y que solo es reconocida por toda la toxicidad que carga en su vida.
9. Acepta la responsabilidad.
Si quieres darle vuelta a la página y aprender de este error, es momento de aceptar que no eres perfecto y que cometiste un error.
Incluso, que vas a vivir con las consecuencias de tus actos y que con el tiempo demostrarás que eres más que un manipulador.
La clave está en que lo hagas por ti y porque sabes que es lo mejor, no para volver a caer en lo mismo.
10. Detente.
Cuando notes que estás cayendo en los malos hábitos o tienes el impulso de sacarle provecho a una situación, ¡detente!
Reflexiona si quisieras que te hicieran lo mismo o si es un lugar al que quieres volver. ¿Ser un manipulador te ha servido en algo?, probablemente no.
Así que detente y hazte responsable de tus acciones.
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