Si te está costando encontrar motivación para este nuevo año o no has podido valorarte para confiar en ti y en tus metas, es momento de tomar una pausa.
Necesitas entender que no debes lograr todas tus metas al instante o lo más pronto posible, sino que debe ser un logro importante y que perdure.
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Y el principal paso para obtener el éxito es valorarte y confiar en ti mismo. Porque de lo contrario será muy difícil que puedas enfocarte en lo importante y obtener lo que deseas.
Necesitas construir una mejor relación contigo mismo, para que así puedas tener la seguridad que te ayude a ir por todo.
Por esto, a continuación, queremos presentarte algunas enseñanzas que debes recordar cuando no puedas valorarte, creas que no lo lograrás o te sientas perdido.
Así verás que aunque no lo parezca, lo estás haciendo bien y estás a punto de triunfar:
7 lecciones que te ayudarán a valorarte y enfocarte en lo que es importante
1. Rendirte no es igual a fracasar.
Por mucho tiempo nos han hecho creer que debemos luchar por algo hasta el último minuto de nuestra vida.
Sin embargo, una cosa es trabajar por lo que deseas y otra aferrarte a obtener algo que quieres por capricho.
Antes de aferrarte a algo o alguien, necesitas valorarte y recordar que mereces algo mejor, que renunciar a eso que no te hace bien no te vuelve un fracasado.
Y que elegirte a ti mismo siempre será la opción correcta.
2. La lección se repetirá hasta que la aprendas.
Tropezarás con la misma piedra una y otra vez, hasta que entiendas que estás tomando el camino incorrecto y que seguir ahí te seguirá haciendo daño.
La vida no te está diciendo que eso es para ti o que te debes esforzar más, sino que debes entender que te está poniendo a prueba para darte algo mejor.
Pero seguirás perdiendo y obteniendo lo mínimo por seguir aferrándote.
3. Puedes sentir tristeza después de tomar una decisión.
Y esto no significa que te hayas equivocado o que te llevará al fracaso.
Si no que es señal de que valoras lo que tienes y no quieres que esto se vea perjudicado o lo termines perdiendo.
Sientes tristeza porque te estás atreviendo a ir por todo y esto puede ser nuevo para ti.
4. Cuida de ti antes de que te veas obligado a hacerlo.
No sabrás lo valiosa que es tu salud hasta que estés luchando por ella y te veas obligado a salvarte.
Si no quieres llegar a este punto, es momento de que te conviertas en tu prioridad, pero no solo en lo profesional.
Necesitas prestarle atención a cada área de tu vida, desde lo físico, mental y personal.
5. Tu único oponente eres tú.
Tal vez, creas que necesitas probarle algo al mundo, a tus amigos o familiares, sin embargo, te estás equivocando al hacer una competencia de cada aspecto de tu vida.
Porque a la única persona que debes vencer es a tu yo del pasado.
Deja de creer que los demás están en tu contra, te envidian o debes ganarles a toda costa, porque esto solo te hará perder tiempo y energía.
Mejor enfócate en convertirte en la mejor versión de ti mismo.
6. Para abrazar el mañana, debes dejar ir el ayer.
Si mantienes una mano en tu pasado y la otra en tu futuro, no podrás valorarte ni obtener éxito, porque no estás haciendo nada por ti en tu presente.
Vives pensando en lo que ya no puedes cambiar y en lo que aún no puedes controlar.
Lo mejor que puedes hacer hoy, es crear pilares que te impulsen a que tu futuro sea el que deseas. Pero necesitas concentrarte en el ahora.
7. Hazlo simple.
Deja de complicarte o de creer que cada acción es un reto que debes superar con honores. Porque esto no te llevará a nada.
Te estás complicando más la vida y estás retrasando tu éxito.
Habrá cosas difíciles que tienes que enfrentar, pero también estarán las sencillas que te aportarán mucho, eso no te volverá menos talentoso, al contrario, denotarás que tienes las habilidad suficientes para superarlo.
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