Te compartimos 12 pequeñas acciones diarias que te ayudarán a sentirte bien físicamente, es decir, ir mejorando tu condición física si de plano llevas una vida muy sedentaria.
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Las personas inteligentes tienen menos amigos por estas razones…
1. Camina, ve de menos a más.
Si generalmente tus recorridos no incluyen distancias a caminar y tampoco realizas actividad física como hábito, entonces procura empezar a caminar distancias cortas.
Estaciona tu carro más lejos de tu trabajo o levántate en las mañanas a caminar incluso dándole vueltas a tu cuadra.
Ir de menos a más te ayudará a adaptar tus horarios y metabolismo a esta nueva actividad.
2. Sube o baja escaleras.
Es como el punto anterior pero con un ejercicio diferente, subir y bajar escaleras es un excelente ejercicio.
Por ejemplo: pide que el elevador te deje a dos pisos de donde vas y sube el resto por las escaleras.
3. Toma agua en sorbos pequeños.
No necesitas beberla en grandes tragos pues así no ocupas sus beneficios.
Toma agua poco a poco durante todo el día, recuerda que cuando sientes sed es porque ya estás deshidratado, evita que esto pase.
4. Reduce tu consumo de azúcar.
Lo mejor es que evites los endulzantes y te acostumbres a los sabores naturales, pero si te es muy difícil, reduce las porciones o el consumo de dulces y bebidas embotelladas.
5. Reduce el consumo de antojitos, ve de más a menos.
Hazlo de forma gradual para que sea menos la tentación. Comienza con las porciones y después las ocasiones.
Por ejemplo, si antes te comías 6 tacos cada 8 días, primero comienza a bajar a 4 tacos, después cada quince días, así podrás seguir dándote un gustito sin que la tentación te haga perder el control.
6. Después de comer lávate los dientes.
Verás que eso te ayudará a alejar los postres o dulces.
7. Diferencia entre sed y hambre.
Aprende a identificar las señales que manda tu cuerpo, suele pasar que pensamos que tenemos hambre cuando en realidad es sed.
8. Quédate de pie.
Así quemarás unas cuantas calorías.
9. Lleva un diario.
Escribe en él algo positivo de cada día, algo que te costó trabajo hacer y algo que hizo el día distinto.
10. Cuida tu postura.
Pararte derecho, sentarte correctamente, no cruzar las piernas… Cuida tu postura pues es parte importante de tu salud.
11. No te saltes el desayuno ni la cena.
Evita los ayunos prolongados, además de afectar tu salud, el hambre será algo más difícil de manejar.
12. Ponte metas en las porciones, no en tu ropa, talla o peso.
Es decir, piensa que, si normalmente te comes 7 piezas de pan dulce a la semana (una diaria), tu nueva meta será comer 5 y, poco a poco, bájale a las porciones de los alimentos que se quedan en tu abdomen.
Así podrás manejar de forma más certera tus porciones sin presionarte en entrar en un pantalón talla 5.
¿Qué te parecen estos pequeños esfuerzos para sentirte mejor físicamente? Son el inicio de una etapa más saludable, lo que viene después es algo que requerirá mucha voluntad y disciplina de tu parte.
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