Lo sabemos, cuando estás enojado eres otro, porque dejas que las emociones te dominen y se expresen como quieran.
Sin embargo, dejar que la negatividad o el impulso dominen una situación complicada, no es lo mejor para ti.
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Porque podrías hacer cosas que empeoren la situación o que afecten a tu pareja y a la relación de forma importante.
Es importante recalcar que una cosa es que demuestres tu enojo de una forma saludable y otra muy diferente que te desquicies por completo y termines lastimando a tu pareja y a ti.
Por esto, si estás enojado, debes tomarte un momento para analizar tus emociones y para no terminar haciendo algo de lo que te arrepientas y te cueste muy caro superar:
5 cosas que no debes hacer si estás enojado con tu pareja
1. Hacer algo impulsivo.
Tal vez, creas que esto no lo puedes controlar y que solo te debes dejar llevar por la corriente, sin embargo, si se siente mal es porque lo es.
Necesitas escuchar a tu intuición y saber que lo que estás a punto de hacer no es nada agradable ni que te dará satisfacciones.
Solo causará que te sientas peor e incluso, que tú termines siendo el malo de la historia. Por esto, si estás enojado, no hagas nada que no harías cuando estás tranquilo y feliz.
2. Decir algo que no sientes.
Esto va ligado con el punto anterior, en donde te dejas llevar por el enojo y dices cosas que no sientes.
Sin embargo, sí puedes detenerte, sobre todo, en aquellos momentos en donde sabes que la conversación no va a ningún lado o cuando el enojo va aumentando.
Porque una cosa es estar enojado y otra desquitarte con una persona que no tuvo la culpa.
3. Creer que tienes la razón.
Sí, habrá ocasiones en donde tú tengas la razón y tengas la solución al problema, pero debes tener en cuenta que se trata de cómo lo pides.
Porque si estás enojado y tienes la razón, parecerá que no es así y que solo estás a la defensiva o deseas que solo se haga tu santa voluntad, para que así tu pareja sea la perdedora.
Incluso, si sabes que tu pareja es muy terca y tú te pones en el mismo nivel, la discusión se volverá muy tóxica y nunca terminará. Por esto, debes aprender a ceder y a soltar cuando sea necesario.
4. Insistir.
Tal vez, creas que tu enojo se pasará rápidamente si tu pareja contesta de inmediato tus preguntas o si todo se arregle al instante, pero muchas veces, se necesita de tiempo y paciencia.
Por lo que acorralar a tu pareja o insistir en resolver las cosas ya, no es lo mejor.
Ya que, estás enojado y esto no te hace pensar de una forma razonable, incluso, no eres capaz de ver tus errores, por lo que es mejor tomarse un tiempo para calmarse, respirar, relajarse y seguir con la conversación.
5. No reconocer tus errores.
A nadie le gusta que le digan sus errores o defectos, pero es necesario tenerlos claros, para así modificar comportamientos y hacer lo mejor por la relación.
Sin embargo, si tú te cierras y crees que todo lo haces bien o eres perfecto, te estás equivocando y mucho.
Porque nadie es perfecto y aunque te equivocaste en esta ocasión, no significa que seas el peor hombre o pareja del mundo, sino que eres humano y puedes mejorar.
Por esto, si estás enojado, no te enfoques en defenderte o en asegurar que tú no fuiste el culpable, sino en calmarte y aceptar que esta vez te toca aprender y corregir.
Que aquí no hay un ganador o un perdedor, sino una pareja que está disponible a hablar con respeto y a mejorar por el bien de la relación.
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