Si en tu trabajo te conocen como el “enojón” o el “grinch” porque los 365 días estás de mal humor, es porque no te entienden.
Nadie puede ser feliz las 24 horas del día y a veces es imposible ver las cosas de manera positiva.
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Incluso, algunos piensan que eres un amargado, pero no es así, simplemente no tienes ganas de fingir “ser feliz” todo el tiempo.
No tienes la necesidad de demostrarle al mundo que estás bien, porque tú lo sabes y eso es muy válido.
De hecho, la ciencia ha declarado que las personas con mal humor tienen inteligencia superior al del resto y no solo eso…
Las personas con mal humor son más inteligentes y trabajadores
Diversos estudios consideran que las personas con mal humor suelen encontrar mejores trabajos y son capaces de detectar las amenazas de manera pronta.
Incluso, mencionaron que las personas alegres se dejan llevar por la euforia y sueles realizar situaciones peligrosas para sí mismos.
Una investigación de la Universidad de Nueva Gales del Sur, en Sídney, realizó una serie de experimentos en los que se manipuló el estado de ánimo de los participantes. En el estudio usando películas y recuerdos positivos y negativos.
Los resultados destacaron que la tristeza y el mal humor mejoran la capacidad de juzgar a otros e incrementan la memoria.
Además, tienen mayor capacidad para argumentar mientras que los optimistas tienen más facilidad para crear, imaginar y cooperar.
Los estudios realizados por Joseph Forgas concluyeron lo siguiente:
“Los estados de ánimo negativos indican que estamos en una situación nueva y desafiante, requerimos un estilo de pensamiento más atento, detallista y observador”.
Más pruebas a favor de los “enojones”
Otro estudio de la investigadora Gabriele Oettingen de la Universidad de Nueva York, comentó que las personas con mal humor evitan estancarse en su zona de confort.
Se esfuerzan de manera continua para establecer mejores relaciones en el trabajo y suelen ser más persuasivos.
Así que no te preocupes si no eres el alma de las fiestas o una que otra persona te temen en el trabajo por tu mal carácter.
Tu mal humor te está ayudando a lograr tus propósitos y a ser una persona más inteligente, habilidosa y poderosa.
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