La ansiedad funcional es un trastorno en el que las personas que lo padecen parecen organizadas y que tienen todo bajo control.
Siempre lucen presentables, son puntuales y optimistas por fuera, pero por dentro luchan, tienen pensamientos ansiosos y preocupaciones, incluso, se sienten totalmente incapaces de enfrentar cualquier situación.
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La persona que la padece es capaz de mantener la ilusión de que funciona y está bien mentalmente.
De hecho, pueden ocultar sus síntomas de ansiedad tan bien que parecen que tienen una buena y sana vida. Sin embargo, todo esto es parte de la ansiedad funcional.
Porque están interiorizando el hecho de que está experimentando todos los síntomas crónicos y debilitantes de los trastornos de ansiedad.
Desde el miedo, preocupación excesiva, hipervigilancia y respuestas físicas como presión arterial elevada, insomnio y problemas gastrointestinales.
Tal vez, creas que esto no te pasa a ti y que eres un hombre que ha aprendido a lidiar con los problemas o que se organiza, pero no es así, sufres de ansiedad funcional.
Es momento de que dejes de engañarte y notes que no estás bien y necesitas un respiro, además de tratar este problema:
Señales de que tienes ansiedad funcional
1. Solo puedes trabajar bajo presión.
Es decir, siempre sacas tus pendientes, terminas tus actividades y las entregas en el tiempo debido.
Sin embargo, lo haces todo al último minuto y es porque procrastinas demasiado, lo que indica que solo te estás atormentando con tus deberes y no los disfrutas.
Solo los sacas adelante porque debes y no porque sea algo que disfrutes o te brinde una satisfacción laboral.
2. Estás tenso la mayor parte del tiempo.
Te has tomado esta situación a broma porque aseguras que dormiste mal o que tienes una mala posición.
Sin embargo, esto indica que tienes ansiedad funcional, porque aunque te ves bien, siempre te duela alguna parte de tu cuerpo, y es porque está estresada.
No liberas tus emociones, solo las contraes y eso provoca la tensión muscular.
3. Haces mucho, pero siempre dudas de ti.
Sí, eres capaz de lograr con tus actividades del día, pero siempre estás sobrepensando y creyendo que te estás equivocando en algo.
Sientes que necesitas hacer más, que debes esforzarte el doble o que debes demostrar algo. Para ti nada es suficiente, siempre necesitas seguir haciendo algo para que tu mente se calme un poco.
4. Tienes muchos problemas para dormir.
No, no es normal tener insomnio todo el tiempo o que te tardes horas para conciliar el sueño. Esto revela que algo no está bien en tu vida.
Y aunque des lo mejor de ti todos los días, cumplas con tus deberes o trabajes mucho, no hace que te agotes y corras a dormir.
Si no que provoca que tu mente siempre esté activa y preocupada por el día de mañana.
5. Siempre estás desconfiando de ti.
Sabes que eres capaz de lograr las cosas, pero te cuesta mucho confiar en ti mismo, siempre estás dudando o creyendo que aún te falta algo.
Incluso, te da miedo el qué dirán y fracasar, por lo que prefieres seguir esforzándote en otras cosas o ayudando a los demás, para tener puntos a tu favor.
Sin embargo, en el interior sigues pensando que no eres tan bueno y que algún día perderás todo lo que has ganado.
¿Cómo combatir la ansiedad funcional?
– Pide ayuda, tanto a tus amigos, familiares y pareja como con un profesional.
– Aprende a darte prioridad, a darte momentos para ti y para lo que tú realmente deseas.
– Descansa, tomarte un día o un momento para relajarte no te volverá un fracasado, sino que permitirá descansar y volver renovado.
– Aprende a decir que no y pon límites.
– Deja de exigirte tanto, sobre todo cuando ya has dado todo de ti y ha sido más que suficiente.
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