Muchas veces, te hemos dicho lo que necesitas hacer para tener éxito, pero es momento de ver el otro lado de la monda, si te preguntas qué no debo hacer, estás en el lugar indicado.
Si todo el tiempo te estás esforzando en ganarle a los demás o impresionar para que seas aprobado, te estás equivocando.
Te recomendamos:
5 señales de que te estás aferrando a una relación que está destinada al fracaso
¿Ya viste «Bob Ross: accidentes felices, traiciones y avaricia» en Netflix?
Encuentra en el Facebook de Personalista más contenidos similares
Lo primero que no debes hacer es enfocar tu trabajo en tener la aprobación de alguien más.
Es natural buscar oportunidades y circunstancias que nos desafíen y nos obliguen a da lo mejor de nosotros, pero no es bueno que lo hagas solo para quedar bien con los demás.
La fórmula para obtener grandes frutos es trabajar duro, ser responsable y constante, pero para tener éxito en la vida necesitas algo más.
A continuación, te decimos las 7 cosas que debes soltar para que puedas cumplir todos tus propósitos:
¿Qué no debo hacer para tener éxito?
1. Querer tener éxito para agradar.
Lo primero es grabarte esto: no debo hacer las cosas solo para tener una ventaja sobre los demás o para probarle a los demás que puedo. Lo hago porque así lo deseo y es lo mejor para mí.
Si te enfocas en complacer a los demás terminarás agotado y decepcionado de ti mismo.
2. Aferrarte al pasado.
A veces decidimos enfocarnos en lo que ya perdimos o en lo que fue, no porque sea un buen recuerdo, sino porque no hemos podido superar ese dolor.
El problema en revivir el dolor y el trauma es que puede descarrilar tus esfuerzos para mejorar tu vida.
Sí, es fácil decirte que lo sueltes y que sigues adelante, pero debes tener presente que no avanzarás si te aferras al pasado.
Incluso, no te sirve nada sentir dolor o culparte por algo que ya no está en tus manos. Mejor ocupa ese esfuerzo en ser mejor que ayer y en lograr tus metas.
3. Sentirte inseguro de ti mismo.
No te preocupes por lo que los demás piensen de ti, incluso la mayoría de la gente está demasiado ocupada con sus propias vidas como para pensar en ti.
Si crees que eres un hombre fuerte, capaz y valioso, nada de lo que los demás piensen podrá cambiar eso (a menos que tú lo permitas).
La inseguridad es un estado mental, pero también lo es la audacia y la confianza. Mantén la cabeza alta, cree en ti mismo, y es más probable que obtengas lo que deseas.
4. Sentirte celoso y resentido.
Sí, los celos y el resentimiento son emociones comunes, pero que carecen de valor y son agotadoras.
Además, estos son pensamientos irracionales e improductivos que no hacen absolutamente nada positivo para nosotros.
Estar resentido con alguien por su éxito o logro es un pensamiento débil y contraproducente.
Mejor trata de apreciar que lograron el éxito a través del trabajo arduo, la determinación y el sacrificio, lo cual probablemente hicieron.
Inspírate con lo que ellos lograron y enfócate en superarte a ti mismo.
5. Querer hacer felices a todos.
Todos queremos ser aceptados, queridos y apreciados, pero no debes provocar esto sacrificando tu bienestar.
Cuando haces un esfuerzo para lograr el éxito en tu vida, te encontrarás con personas que no querrán que salgas adelante por varias razones; ya sea envidia, amargura, miedo, o algo más.
Pero debes recordar que ese es su problema, no el tuyo.
No es tu trabajo hacer feliz a estas personas, sólo hacerte feliz en lo que elijas hacer con tu propia vida.
6. No te haces responsable de tus acciones.
Culpar a otros por tus problemas y poner excusas nunca dará resultados positivos.
Si quieres tener éxito necesitas hacerte responsable de tus decisiones y acciones, porque nadie tiene la culpa de lo que te sucede en la vida.
Tú eres el que marca la pauta y toma las riendas de su vida, si se las das a alguien más, aún así tú eres el culpable de tu fracaso.
Mejor trabaja duro, confía en ti y ten la determinación de seguir adelante sin poner excusas o culpar a otras personas por lo que te sucede.
7. Repites los errores.
Pareciera que no conoces tu historia y por esto estás destinado a repetirla una y otra vez, hasta que entiendas la lecciones.
Debes tener claro que todos hemos cometido errores, unos más graves que otros, pero esto no nos detiene ni nos convierte en fracasados.
Si eres capaz de redimirte, entenderlo, reflexionarlo, superarlo y sacar lo mejor de él, podrás alcanzar el éxito.
Pero si te aferras a repetirlo una y otra vez, no llegarás muy lejos.
Síguenos en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter e Instagram.