Aferrarte al pasado o atesorar el futuro son dos cosas que te impiden ver que tu presente es grandioso y que ya lo tienes todo.
El pasado, el futuro, los contextos o vida ideales son sólo ideas preconcebidas que nos limitan y no nos dejan disfrutar lo único que tenemos: el presente.
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Es momento de soltar las expectativas que tienes sobre lo que vendrá, dejar de ver el pasado como lo mejor que te ha pasado en la vida y enfocarte en el hoy.
Hay cosas que te impiden lograr tus metas y tú solito te estás metiendo el pie para no alcanzar el éxito.
Suelta lo que no te hace bien para que puedas ganar.
5 cosas que te impiden disfrutar de todo lo que ya tienes hoy
1. Crees que el pasado fue mejor.
Hay muchas personas que viven en una constante nostalgia por lo que fue porque consideran que fue mucho mejor que su realidad actual.
Pero, hacer esta comparación, nunca te permitirá disfrutar del presente, un presente que mañana será pasado.
Hoy tienes el poder de hacer que cada instante cuente.
2. No agradeces.
Siempre nos pasa que damos por hecho todo lo que tenemos, no le damos la importancia y tampoco agradecemos por ello.
Sin embargo, se te olvida que hoy lo tienes, pero mañana podría no ser así.
Si no estás acostumbrado a agradecer, puedes empezar a hacerlo tomándote unos minutos en la mañana para dar gracias por un nuevo día, por tu familia, tu trabajo, por lo que tú quieras.
3. Crees que serás feliz hasta que…
Te has aferrado a pensar que serás feliz el día en el que encuentres el trabajo de tus sueños, tengas mucho dinero o puedas emprender.
Este hábito es un círculo vicioso que no te dejará disfrutar del aquí y del ahora.
Además, siempre te dejará una sensación de insuficiencia, porque cada vez que consigas algo, sentirás que no basta para realmente sentirte bien contigo mismo.
4. Piensas demasiado en el futuro.
Y no es que esté mal ser precavido, pero anticiparte demasiado al tiempo, sólo te provocará angustia y ansiedad.
Lo mejor es vivir un día a la vez, dejando que todo fluya y se dé dependiendo las consecuencias de nuestras acciones y decisiones.
Vive intensamente cada día y hazlo como si fuera el último.
Está bien ser precavido, pero no despegues los pies de la tierra o el golpe podría doler demasiado.
5. Quieres tener todo bajo control.
Esto es totalmente imposible, quizá puedas controlar ciertos aspectos de tu vida, pero no podrás con todo.
Para poder disfrutar del presente debemos aprender a sortear los cambios, a ser flexible, y por supuesto a aprender a soltar cualquier cosa, pero sobre todo a esas personas o situaciones que no suman a tu vida y solo restan.
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